miércoles, junio 01, 2005

Bibliotecas

Siempre me han gustado las bibliotecas y librerías...puedo pasar horas encerrado en ellas sólo viendo los títulos de los libros. Creo que todo es culpa de Borges, que una vez escribió que para él el cielo sería una biblioteca.

Mientras estuve en Miami nunca entré a una biblioteca, no sé por qué. Pero en el imperio del consumismo y el mercado, por supuesto que fui a una librería. Como todo en ese país, son una cadena. A mí me gustaba ir al Borders de Coconut Grove. En todas las librerías te dejan sentarte y leerte todos los libros que quieras, y en esa tenían incluso un café y tocaban bandas de jazz a veces. Era genial. Por supuesto, la verdad era que era un local, no era muy grande, la verdad.

En suecia he ido a sólo dos bibliotecas. Una la de la KTH, y otra la biblioteca metropolitana (literalmente biblioteca de ciudad, stadsbibliotek).

Las dos me encantan.

A la del KTH fuí cuando aún estabamos en invierno. La historia en inglés acá.

Está construida, como todo, en un edificio que quién sabe cuántos años tenga. El techo original, como muchos techos antiguos, era una V invertida. Lo que llaman techo de dos aguas. Al renovarla, quitaron el techo original, pero no las paredes que lo sostenían, es decir, dos paredes quedaron con un triángulo encima. Le colocaron un techo cuadrado entonces, y sellaron el edificio con ventanales, en vez de con bloques. Es difícil de describir. En la segunda foto de la página a la que hice referencia puede verse lo que describo. El punto es que en la sala principal de la biblioteca siempre puede verse el cielo.

Una cosa particular sueca es cierta relación un poco extraña (para mí) con la luz. Normalmente los edificios no están iluminados de la manera en que yo supongo debería hacerse: con una luz fuerte desde el techo que ilumine como el sol al mediodía. Normalmente usan luces más tenues. En el caso de la biblioteca, no hay luces en el techo. No que yo lo notara. Hay luces en las paredes que generan una luz tenue, y cada estante tiene una luz también tenue (para mis estándares) pero que obviamente es más que suficiente para leer los títulos de los libros. La visión al entrar es de un sitio extremadamente acogedor. Creo que esa es la razón.


Biblioteca Metropolitana

A la biblioteca metropolitana entré porque me mandaron. La profesora de sueco nos pidió que nos registraramos en la biblioteca y pidiéramos en préstamo un libro escrito en formato "fácil de leer" lätt att läsa. Saqué uno cualquiera que me llamó la atención, y resultó ser un clásico de la literatura sueca (como sacar al azar El Quijote...pero no tan largo) de nombre "Ciudad de mis sueños" Mina drömmars stad. En lo que entré en la biblioteca, recordé lo que decía al principio de Borges.


Entrada a la sala principal Posted by Hello

La sala principal es circular, y las paredes están cubiertas por tres pisos de libros.

Vista de la sala principal Posted by Hello

Por supuesto, el sistema de préstamos de libro está más allá de la comprensión de un pobre tercermundista (léase Wilian). Luego de que pides tu tarjeta de susbscripción, simplemente agarras el libro que quieres, te vas a una maquinita con una pantalla, introduces el carnet, y tu código secreto, y pones el código de barras del libro en un lector. La maquinita imprime un recibo que dice cuándo tienes que devolverlo. Ya está. La otra única medida de seguridad que ví era que en la entrada había uno de esos detectores que hay en las tiendas.

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